28 sept 2009

El tiempo cambia los sujetos

tres casos actuales



*El Blog: ayer chiche del caretaje autofetichista, hoy lugar de resistencia



hace un par de años el blog se erigió como el juguete predilecto de los narcisistas adictos a todo lo nuevo; cada boludo se ponía todas las tardes meta subir fotos de sus torsos musculosos, sus peinados a la planchita y comentarios como "XD ke kopado tontissssss.... te amooooooo XDDD". así nació el cáncer social del floggerismo. pero como todo este tipo de cosas, pasó de moda ante la aparición de una forma de relación mucho más extrovertida, peligrosa, contra-intimista, mundial, enajenante, etc. el FEISBU. y tooodos los giles se pasaron al feisbu ((todo bien, eh! no bardeo a los que tienen feisbu, sabrán ellos qué problemas de socialización están queriendo tapar con eso. cada uno, cada uno.)) y con una sonrisa en los labios entregaron todos sus datos personales y los de sus allegados -incluso los de los que nos mantenemos al margen del mundo feisbu- a empresas multinacionales, a agencias de inteligencia, al verdulero y a la vieja del fondo, la que baldea a las 6 a.m.
y los blogs se fueron vaciando de liviandades y fueron quedando y se fueron sumando las voces que quedan cuando pasan las modas. hoy por hoy, los blogs que funcionan son de salas de teatro, revistas on-line, gente que escribe poesías, grupos de danza, recomendaciones de música, críticos literarios y teatrales, fotógrafos, pintores. ya no son el sustento de este tipo de comunicación las fotos floggers ni los comentarios de infradotado. ahora queda lo más cercano a lo que otrora fuera el under (término bastardeado si los hay), la difusión casera y el fanzine mal impreso. empezó a salir arte del blog.


*El público del gordo Casero


Casero siempre fue un soberbio de mierda y un malaonda, desde que era el gordo boludo de la tele hasta ahora, que es el gordo Casero, el boludo de la tele que me hace cagar de risa; el tipo eso no lo cambió. pero el público que lo sigue cambió radicalmente desde que el mundo del humor se adaptó a -y adoptó- su tipo de humor. con el boom de Todo por $2 primero, después las repeticiones de Cha Cha Cha en i-sat y Youtube, y la popularidad con las novelas de Suar: Vulnerables, Locas de Amor, Tratame Bien (será casualidad que en las 3 esté el psicoanálisis involucrado?). pasó de gente que buscaba algo distinto -en contraposición a lo burdo de Calabró, Francella, Midachi- a gente que se ríe cuando en la pantalla del teatro aparece dibujada una poronga. el viernes fui a verlo y vi tanto pelotudo y tanto gato que no sabe bien qué hace ahí, pero por las dudas se calzó el animal print y las botas de cuero, que pensé que estaba por ver a Freddy Villarreal. ya la previa, la cola, las ropas, y después las risas, los comentarios en voz alta, todo. hijosdeputa.
está relacionado con lo que dije antes del bastardeo del under; exprimir ahora con todas las armas de la masividad lo que supo ser siempre de público reducido, casi de culto. pasa con Casero, Massacre, quieren llevarse a Los Macocos también. hijosdeputa.


*Divididos

cada vez hacen música más pedorra, los recitales son una repetición artante de lo mismo cada vez (basta del solo con la pelotita de tenis, Dió!!!), se hacen más los supermúsicos virtuosos, los que hacen letras rebuscadas, y se alejan totalmente del rock. qué putos se volvieron!! Mollo Anti-Rock!!

2 comentarios:

  1. hey ya hey ya hey ya ya tranquilo meeen!!! peor es casarce. Como dijo Mujica los argentinos tienen que quererce mas... hagamos el amor con joventicas suecas disfrazadas de colegialas y no la guerra!!!
    viva el amor, palito ortega, y reque te buena de la hija!!!

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  2. Debo disentir con ustet señor! siempre hubieron blogs de los buenos, y los boludos siempre tuvieron y siguen teniendo su fotolog. Los datos del facebook, antes de que los subas, e incluso antes de que te dieras cuenta de tus gustos, tu comportamiento ya estaba siendo analizado y registrado! Casero siempre fue el vestido del rey y Divididos por siempre rockeará!

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Gracias por comentar! Alláh te bendiga, amigo mío.