Primer Amor

Influenza

en casa siempre sonaba música. mucha y variada. por el lado de Madre, silvio rodríguez, Floyd, serrat, fito, charly y hasta en una época rubén blades.

pero como buen hermano menor (muy menor) la principal influencia vino siempre de Juli, Rulo y Rami. living colour, spin doctors, soda, sumo, rem, inxs, red hot, don cornelio. tengo la imagen posta de estar jugando a los playmobil en la que después fue mi pieza mientras sonaba de fondo Sultans of swing - es que ese tema me facsinaba. y de ahí fui absorviendo todo, salvo cuando Rulo la limó con la música clásica, el jazz y esas cosas aburridas que no gustan a nadie. fue lo único que decidí esquivar por mi propia salud mental.

hablando justamente de mi buen hermano que ahora se laurea entre teatros colones, grandes festivales de rock y pablito lescano, hubo un disco que en algún nodo del tiempo pasó de ser suyo a ser mío (esas cosas que pasan siempre entre hermanos). en realidad, de un amigo suyo (Taco?) pasó a ser de Rulo para después convertirse en mi primer disco propio

Energía, pogos y descubrimientos


Y AHORA QUÉ PASA, EH? era el título del glorioso álbum de Los Violadores.

lo escuché hasta gastarlo. me sabía todas las letras de principio a fin, los arreglos de la guitarra, lo que decía pil cada tanto. claro que muchas de las letras ni las entendía, como me pasaba con muchos otros discos, como el que fue mi 2º disco "Bersuit Vergarabat y punto", que hablaba de ponerla, de hociquitos de ratón, de papitas y yo cantaba como si hablara de caramelos, toboganes y tortugas. todavía me acuerdo que una vez mi prima Belén me preguntó qué escuchaba y al nombrar la banda puso cara de todo mal "ahhh qué nombre, cómo vas a escuchar a esos tipos, VIOLADORES. es algo horrible". era chica ella también.

la cosa era llegar del colegio (todavía iba a la tarde), agarrar el equipo Sanyo que ya tenía adentro el disco desde la tarde anterior, ponerlo a todo culo y empezar a cantar, hacer pogo contra mí mismo y contra las paredes, delirar con lo que podría ser el video clip de cada tema. y ahí empecé a sentir que había una energía que sólo mediante esa vía conseguía. que me ponía contento, que me hacía bien y me dejaba bien arriba. con el tiempo -creo que fue Giovann el que me lo dijo- me enteré de que eso se llamaba PUNK. punk... punk...

los violadores no son una banda que uno diga uáaa cómo pegan letras estos tipos, pero algo tienen. y para mí, en ese momento, eran LAS letras (las restantes no las conocía o no las entendía). ahora releyendo el librito del disco encuentro algunas cosas que están buenas pero la mayoría sinceramente no dicen nada. lo que es increíble es cómo sus temas me siguen transmitiendo esa cosa inexplicable de la música que no te entra por los huesos porque ya la tenés tan asimilada que es tus huesos. escucho "espera y verás", "como la primera vez" o "revolución inter" y el cuerpo se me hace de goma eva.

las cosas nuevas de pil, stuka y -de nuevo- los violadores mucho no me coparon. es que creo que si los conociese hoy la cosa sería muy distinta, incluso empezando con el mismo disco. es como un amigo que uno guarda de la infancia más primera y que se quiere tanto aunque ya se tenga tan poco en común. hace un par de años los vi en vivo por primera vez y fue impresionante. hasta los escupí.


Paredón y después

más adelante empecé a escuchar Green Day, A77aque, tuve mi primer banda rabiosa (a los 9 o 10 años, con el jóse di giorgio) y ahí si, ya se me metió adentro el punk para no irse nunca más.

puedo ser fanático del tango, enloquecer con el rock, disfrutar de la tranquilidad de los cantautores, divertirme con la cumbia. pero el corazón me tira siempre para el mismo lado; con el punk tengo y tendré por siempre una relación de puro amor, esa sensación única de que eso te hace tanto bien como nada más.